Mirla, a pesar de tener una cara de niña tierna y buena, es muy fría y áspera. Tiene muy poca confianza, y no demuestra sus sentimientos o su estado de animo. Tiene extraños encuentros en sus sueños, no los entiende. Esa persona que siempre aparece ahora está ahí con ella, y ella ni lo nota. O eso es lo que quiere hacer pensar. Pero debería de cuidarse, esa persona está obsesionada por ella, le atrae hasta el último cabello de ella, pero el está encadenado, no tiene ningún futuro próspero, solo perdición.