Tyler no es atractivo, interesante, social, divertido, o tan siquiera una buena persona. Es en realidad alguien con manos tan frías que puede apagar el fuego con ellas sin sentir dolor. Pero Josh, el chico del camión, quien lo acompaña a la escuela y le sonríe de vuelta; hace que Tyler se le revuelva el estomago y sonría estúpidamente. Tyler siente por primera vez que el amor esta hecho para todos, incluso para el. Entonces ya no es frío y su corazón empieza a arder. Su corazón se empieza a derretir entre sus manos, y el mismo no sabe si es bueno o es malo. El problema, el único problema que existe; es que Tyler lo quiere, (de una manera que nadie más podría imitar), pero Josh, Josh solo le sonríe de vuelta.