Cenizas de Azúcar.

La vida puede dar muchos rumbos, a la vez que puede enseñarnos muchas cosas. ¿Pero qué sería de la vida sin los caminos rocosos y difíciles de cruzar? Una vida llena de atajos es una vida mediocre y que no es divertido de vivir. Los altos y bajos siempre serán beneficiosos, en ciertos modos; pero sin ellos no se podrían vivir las mejores cosas que el destino tiene para nosotros.

La vida es dulce y a veces amarga, es por eso que en algunas circunstancias preferimos esconder nuestros verdaderos pensamientos y sentimientos para ahorrarnos problemas innecesarios. Llegan momentos en los que tenemos que despedirnos de nuestros seres queridos, haciendo que dejemos de sentir el dulce sabor de la felicidad y pasamos estar tristes y desanimados. Es por eso que dicen que la vida es una y hay que disfrutar cada momento de ella, porque no sabemos cuando disfrutaremos del azúcar en el café o cuando tengamos que dispersar las cenizas en el mar.

Así como nunca se sabe si un día tendremos que toparnos con Cenizas de Azúcar.