Una distopía en la que los seres humanos son gobernados por los animales y los animales son gobernados por un vegetal. Una sociedad sin conocimiento de la moral y de las tradiciones del viejo mundo. Los humanos nacen de los experimentos con la genética que realizan los animales. Conviven sin el uso de ropas, por lo que la desnudez es algo normal para ellos. Aun así, el sexo está prohibido, al igual que las muestras de afecto, en especial el amor romántico; están constantemente reprimiendo sus deseos sexuales, ya que quien tenga sexo será condenado a muerte inmediata. Un día, Zah, el gobernador supremo, decide como recompensa al buen comportamiento del pueblo, permitir el sexo y el amor de manera libre y desenfrenada - algo que solo se les permitía a los animales -, por lo que las personas comienzan a descubrir el mundo de las relaciones sexuales, el deseo, la pasión y el amor. ¿Qué prevalecerá en este mundo?, ¿el deseo sexual o el amor? Un libro que nos muestra la lucha constante contra nuestros instintos más primitivos y al mismo tiempo esenciales de la humanidad: el sexo, el cual se esconde con la máscara del amor para que no sea visto como algo malo, para así representarlo con algo hermoso e ideal como el sentimiento del amor, y no como un deseo carnal, sucio y pecaminoso. Una sociedad que tiene sexo en todas partes, desenfrenadamente, donde las violaciones, las infidelidades y el sexo sin amor es algo normal. ¿Qué es más fuerte: el amor romántico o el deseo instintivo y primitivo de tener sexo?