Ross es una chica afortunada que hizo sus deseos realidad como ir a vivir a Boston y terminar sus estudios universitarios ahí mismo, junto a su actual novio, Harry. Sin embargo, la noche que soñó con Adam hizo que todo lo que tenía construido cayera en picada. Pero ella sabía que a pesar de sus esfuerzos de calmarse de que nada malo pasará, pasó. Independientemente de lo que hiciera el destino o la coincidencia haría de las suyas y no tendria escapatoria.
Sus sentimientos, de los que pensó que ya se habían perdido, salen nuevamente a flote. Las dudas se formarán en su cabeza y tal vez empiece a dudar de los sentimientos que tiene por Harry, haciendo que la relación se vea afectada por la culpa y la decepción de sí misma.
Sabiendo que, a pesar de sus esfuerzos que tendrá que hacer para poder seguir sin ser afectada por Adam, la llama que alguna vez se apago está por hacer una brasa para volver a ensenderse.
(ESTA HISTORIA ES UN BORRADOR, CUELQUIER ERROR SE ÍRA CORRIGIENDO CON EL PASO DEL TIEMPO)
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