Marinette está confundida, no sabía cómo era posible, pero lo sabía. Y lo sabía TODO.
Desde hacía bastante semanas habían comenzado a aparecer personas transformadas en otras, que provocaban caos en el país y destrozaban familias al no encontrar como devolverlos a su estado original.
Simplemente a aquel que convertía a las personas en monstruos se le llamó entre susurros "Le Papillon". Esta persona, desconocida para todo Paris, era un enigma total, pues se aprovechaba de los sentimientos humanos y los consumía a tal punto que estas personas aceptaban un extraño pacto donde ellos conseguían unas reliquias invaluables que necesitaba el hombre detrás de las marionetas a cambio del poder para vengarse.
El desastre reinó en Paris durante días, hasta que una tarde, Chat Noir apareció.
Su identidad era un secreto que nadie debía conocer. Su poder: el de la destrucción. Su objetivo: detener a Le Papillon.
Todas las señoritas en Francia se volvían locas por el joven y conforme a esto, el muchacho llegaba a ser sumamente vanidoso y coqueto, demasiado para el gusto de Marinette. A ella en particular jamás le pareció llamativo, no al menos hasta una tarde en la que el joven de verde mirar y traje negro de gato le salvó.
Los secretos en la familia de la chica, la orillan a adentrarse en una aventura por demás peligrosa, donde no solo ella corre peligro.
La cuestión es si podrá enfrentarse a ello, o huirá como siempre lo hace.
Los personajes no son míos, pero la historia es de mi propiedad.
Iris va a llegar al fútbol club Barcelona con una sola misión, ser la encargada del documental secreto que van a hacerle a un Gavi que acaba de romperse los cruzados y que ha dejado claro al club que no quiere saber nada de documentales.
Ella no aguantará el mal humor del sevillano, este por su parte no le dará la oportunidad de conocerla.
Pero el amor tiene otros planes para ellos.
¿Qué pasará cuando Gavi se entere que ella está detrás de su documental con el tiempo?