Fueron unas vacaciones del 2017-2018 inolvidables -Finn, ¡sueltame!-Digo tratando de zafarme de los brazos del rizado pero aun así con una sonrisa en el rostro. -Primero prometeme que te meteras a la piscina. Finn se estaba riendo sin tomar en cuenta que estabamos en uno de sus eventos en Paris, Francia, deberiamos estar con todos adentro del hotel, pero no, cuando Finn encontró la piscina solo faltaron 5 segundos para que se lanzara a agarrarme. -No tengo traje de baño, ya te lo dije mil...-y señoras y señores, Finn me había tirado a la piscina con ropa y todo. Subo a la superficie de la piscina tratando de flotar de la mejor manera ya que la ropa hacia que el cuerpo me pesara más, sobre todo los zapatos, por lo que tuve que sacarmelos con los pies y dejarlos caer al fondo de la piscina. -¡Finn!-dije mirándolo un poco molesta, pero él se estaba riendo y fue incontrolable no reír junto a él. -Allá voy-dijo el pelinegro sacandose los zapatos. -¿Qué? Finn, es tu even...-No me dejo terminar la oración, ya se había tirado a la piscina. Cuando salio a la superficie los dos quedamos flotando con nuestras ropas empapadas de agua, mirandonos, pero parecia no importarnos, fueron 10 segundos de silencio hasta que los dos estallamos en risas. -Esto es una locura-me dijo aun con una gran sonrisa en el rostro. -Eso que hoy parece una locura mañana será uno de tus mejores recuerdos-dije sin más, había leído esa frase días antes de venir a Paris con él. Y ahí fue cuando nos dimos cuenta que estábamos sembrando recuerdos inolvidables juntos y faltaban más, muchos más.