Para un romántico empedernido como Preston, es muy fácil caer ante los pies de cualquier ser humano que lo trate bien. Enamorarse no lo sorprendió, la sorpresa que se llevo fue al darse cuenta de quien lo hizo. La situación se volvió preocupante cuando un día tosió unos pequeños pétalos azules, y desde ese momento, tan solo empeoró. Portada: @anita078uwu (twitter)