JungKook tiene una amante.
Dejará a su encantador esposo JiMin y a sus dos pequeños hijos sólo por ir a vivir una aventura. JiMin lo deja ir, con dignidad, sin atarle ni reprocharle. Él es un caballero.
Han pasado los años, JungKook está arrepentido y quiere regresar, recuperar a su familia, al amor de su vida.
¿JiMin será capaz de perdonarle? ¿Será esta la historia dónde el final es feliz para todos? El amor no debe triunfar siempre, no cuando ha sido maltratado y humillado. El amor no es resentido, pero sí sabe dar lecciones de vida.
Y para JungKook, JiMin era el amor, aunque este le dijera: "Adiós JungKookie"