No todo se expresa a través del cuerpo porque uno lo retiene en su interior. Pero siempre las emociones se pueden ver a través de un par de cristales que sienten todo a su alrededor.
Siento mil ojos sobre mí.
Miradas que atraviesan, dañan y a la vez curan.
Las águilas avistan su presa, y una vez que la eligen, esta no puede hacer nada.
Solo queda esperar, ya que, aunque parezca una cosa, siempre puede haber más opciones.