Nunca sabrás que te deparará el futuro hasta que este no te pegue de frente. Lo que sí te deseo es que sea mejor que el mío. Esta no es una historia feliz, es mi historia, la cual voy a compartir con este cuaderno como parte de mi "terapia recomendada", la verdad la prefiero a tener que contarlo de palabra. Quizás, la cuando termine tendré el valor de presentarla al juez de mi caso para que pueda hacer justicia a mis compañeras. Por ahora y aún sintiéndolo mucho, no soy capaz de contar lo que pasó, rememorarlo en voz alta, tan solo pensar en ello me rompe por dentro en mil pedazos. Sé que soy un a cobarde, debería hacer lo que debo, no solo por mi sino por todas, pero no puedo, simplemente no puedo. Lo intento olvidar para que no sea tan doloroso pero, al primer sueño todo vuelve, como una pesadilla que no deja de atormentarme. Ahora mismo tengo un nudo en la garganta y soy perfectamente consciente de que voy a echarme a llorar en cualquier momento, sencillamente esto me supera, después de todo sigo siendo la misma niñita débil.