Íbamos caminado por la calle, juntos como buenos amigos que se supone que somos, sin embargo no puedo dejar de reparar en que todos nos miran, todos lo miran, todos lo miran a él. Hasta que se acerca una niña a pedirle una foto me ignora va directo a él, como siempre los demás observadores fantasmas toman vuelo y la imitan, nunca pensé que llegaría a pasar esto, que me sentiría así, que tendría que que compartir a mi amigo el elegido. Debí suponerlo, total él es el elegido.All Rights Reserved
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