Segunda parte de Killer Instinct.
Rae pensó que lo tenía todo perfectamente planeado. Entrar a Beacon Hills, cazar a algo peligroso y salir huyendo victoriosa. Ahora, todo se ha puesto de cabeza.
El juego que Rae ha estado jugando ha cambiado de reglas. Las personas que eran simple piezas en el tablero ahora son sus amigos. Hará todo para proteger a Scott McCall. Y, lo peor de todo, no puede llegar a odiar de todo a Theo Raeken.
Sabiendo que es un pacto con el diablo, Rae se alía secretamente con Theo con unas cuantas condiciones:
Uno: no lastimarán a la rota manada de Scott.
Dos: Rae se queda con la cabeza de la Bestia y de la Loba del Desierto.
Tres: Nadie sabrá de esto. Ni la manada de quimeras revividas de Theo ni la manada de Scott.
Cuatro: Cuando todo esto acabe, ambos huirán juntos.
Rae no sabe lo que está pasando. No sabe lo que hará ni cómo resultará. Solo sabe que vino por un premio, y que a juzgar por cómo sus sentimientos por Theo comienzan a relucir, tal vez se lleve dos.
Han pasado cerca de 7 años después de que ambos miembros de la realeza se vieran por última vez debido a sus deberes reales y prometieron volver a encontrarse, pero.... ¿Será como lo habían planeado?