Acurrucarse y escuchar las historias que Taemin insistía eran reales, era algo que Minho no podía evitar. Nada de lo que Taemin decía era de su creencia, pero estaba dispuesto a darle una oportunidad a esa alocada idea: ser almas destinadas a estar juntas, a través de los años, y de las vidas vividas. Porque adoraba a Taemin, y sabía que algo dentro de su pecho lo había escogido sólo a él. Si Taemin podía explicar ese sentimiento, entonces estaba dispuesto a creer. 2min Oneshot