Las cosas nunca eran simples. Y eso Effie lo sabía muy bien. Algo siempre tenía que pasar. Y si esto no era así, Roth se encargaba de que lo fuera. Dicen que lo que vale la pena, tarda en llegar. Puede que sea así. Puede que Effie y Roth sean almas gemelas. Puede que no. Esta es una historia que comenzó antes de que nuestros queridos protagonistas lo notaran. Pasaron por tantas cosas sin saberlo. Cada día trabajaban en una historia que no sabían que vivirían. Lo suyo tardó en llegar. Pero hasta ahora, ha valido la pena.