Fue notorio el giro tan grande que dio mi rutina de vida diaria desde que conocí a esa chica: Patricia. Esa chica que frecuentaba el café en hermosos vestidos de colores pasteles. Veía la eternidad en los momentos que estábamos juntos y la mortalidad cuando debíamos alejarnos. ... Espero que le guste mi historia que con mucho amor estoy escribiendo, tanto para ustedes como para mi.