- ¿Que soy en realidad?-Mi voz era un susurro ronco. El volteo, su mirada se paseó de mi hasta lo que había detrás y de regreso. -Todo-Respondió viéndome con sus profundos ojos azules-Menos humana. Miles de cosas pasaron por mi cabeza pero una se quedó ahí: Tengo que sobrevivir