Me enamore de Romeo sin ser Julieta... Ese es el mayor problema de mi vida. ¿Un amor no correspondido? No, eso no, a ser sincera eso es lo que menos me importa.
Encontré a un príncipe sacado de sueños, algo así como lo que siempre he querido desde que era solo una niña. Ese que me puede dar un noviazgo encantado, llevarme a su castillo y vivir felices para siempre, pero no todo es color de rosa en la vida real, está relación no funcionaría para nosotros o mejor dicho, para mi. Solo le falta algo de... ¿Maldad...? No me malentendidas, es muy linda una manzana dulce, pero no hay gracias si no contiene su veneno.
Mi problema es fingir ser Julieta y que Guess se diera cuenta. ¿Acaso no puedo ser yo la bestia y el la bella?
Mis padres dicen que no, la sociedad dice que no, los que me conocen dicen que no y es por esto que a mi me toca decir que no aunque mi ser golpee cada pared dentro mío, lista para salir y gritar a todos: ¡Maldita sea no soy una dama y aún así quiero ser princesa!
Pero tranquilos, estoy segura de tres cosas:
1-Alcanzó lo que quiero.
2-Quiero a mi Romeo.
3-Guess es Romeo. ¿O no?