Se sentía tan bien sus besos bajando por mi cuello. Eran húmedos, sus labios llenos y rosados se prendían a piel con ardor. Sus manos bajaron a mis muslos, abriendo mis piernas, se posicionó en medio. Gemi levemente apretando sus brazos cuando sentí su entrepierna rozarme. -Esto esta mal-Dije entre suspiros de placer y necesidad- -Pero se siente bien-Susurro en mi oido, como si fuera alcohol, adormeció mi mente- Tome su rostro en mis manos, y sin pensar mucho, lo bese, sus labios se pegaron a los míos. Eran dulces, masculinos, suaves y tan adictivos. El me sigio el beso. Dejándose llevar. Esto era gusto a lo prohibido, era un placer prohibido.
12 parts