Ellos ya se conocen, pero no lo saben, o más bien, no lo recuerdan. Además, sus vidas son muy diferentes.
Takanori Matsumoto, es el único hijo de una de las familias más poderosas del país. Sus padres son dueños de un imperio de modas y son accionistas en grandes empresas del mismo tipo. Gracias a eso, debido al gran ingreso económico que adquieren cada semana, han conseguido consentir a Takanori en todo, absolutamente, todo lo que él les pide, lo que le da un aire de superioridad, y sus amigos tienden a llamarlo Príncipe. Kouyou, por otro lado, es el hijo menor de la ama de llaves en la casa de Takanori. A diferencia de Takanori, él creció en un hogar humilde y le enseñaron a apreciar las cosas, y por alguna razón, Kouyou termina trabajando en la casa de Takanori, y peor para él, como su asistente personal.