Rosie, ¿Estas segura de esto?- preguntó atemorizado el chico, con la cintura amarrada a la de ella, temblando de nervios y ansiedad, mientras oía la estruendosa sirena que indicaba el inicio de la carrera.-
Ella se volteo, y lo observo un instante, imperturbable, callada y pensativa. Las luces fosforescentes giraban rápidamente a su alrededor, creando sombras y fulgores en el precioso rostro de la chica. Y de pronto, pareció hallar la respuesta. Sus encantadores ojos azules se iluminaron y una sonrisa llena de confianza y desenfado se formó en sus labios.
<<Harry la recordaría desde ese momento, como un ser divino, indiferente a las preocupaciones del universo, como un ángel quebrantado por el mundo y su implacable crueldad.>>
Tranquilo, cariño... Todo va estar bien- murmuró confiadamente la chica, sin temer a nada.-
"Nadie podía adivinar hasta que punto estaba equivocada."All Rights Reserved