"Un Jedi no debe conocer la ira. Ni el odio. Ni el amor." La madre de Keikata le enseñó aquella frase a su hija desde que ella manifestó una gran sensibilidad a la Fuerza. Sabía que Luke Skywalker, el Gran Maestro Jedi, la encontraría en cualquier momento, y cada día la preparaba para eso. Siendo Jedi, no podía sentir apego de ninguna clase, debía influir de manera positiva en el destino de la galaxia y mantener la paz donde quiera que fuera. El apego genera miedo a perder lo que más se ama. El miedo es el camino hacia el Lado Oscuro. El miedo lleva a la ira, la ira lleva al odio, el odio lleva al sufrimiento, el sufrimiento al Lado Oscuro. Keikata nunca sintió miedo hasta el día que su maestro notó un apego que le haría más daño que bien. Después de años de ocultarlo, bajó la guardia en el peor momento. Y aquello causaría en la Fuerza una perturbación de proporciones colosales. Aviso: Este fanfic fue escrito en 2018, antes de la publicación del cómic "El Ascenso de Kylo Ren". ******** Reconocimientos: -Segundo lugar en el 1° Concurso Motín Fanficker, 2018. -Ganadora en el Concurso Premios Fanficlímpicos 2019 de @WattFanLegion.