Esta es una serie de relatos cortos que tienen en común una gran carga emocional, donde la mayoría están narrados en primera persona. Algunos tienen influencia de Poe y Lovecraft, otros bien podrían ser los delirios de un loco, o de un no tan loco, que es perseguido por algo que solo esta en su cabeza, o quizá llegó del infierno para adentrarse en su conciencia. Algunos están narrados por el victimario, otros por la víctima, quien no siempre es asesinada, a veces solo es atormentada hasta la locura. Algunos puede que los hagan reír y otros llorar. En varios de estos relatos las apariencias engañan, no siempre algo es lo que parece...
Algunos de estos relatos fueron publicados en una página de facebook llamada Saturn Night, por lo cual es posible que algunos les resulten conocidos, sin embargo, los derechos de autor están registrados a mi nombre y amparados por leyes internacionales. Pero también incluyo relatos totalmente inéditos, que también están registrados y amparados por leyes de derechos de autor, los cuales espero les aceleren el corazón y los pongan a la expectativa, espero de todo corazón que mis locuras los entretengan, y si creen que soy un caso de psiquiatra, por favor recomienden uno con las tres b: bueno, bonito y barato. ¡Que lo disfruten!
N° de registros:
19-645-373 del 11/05/2017 Parte 1, relatos 1-7
10-661-257 del 25/07/2017 Parte 2, relatos 8-12
10-702-452, 10-702-453, 10-702-454 del 01/03/2018 Parte 3, relatos 13, 14 y 15 respectivamente
10-661-256 del 25/07/2017 Parte 4, relatos 16-21
Dirección nacional de derechos de autor de Colombia.
Saint Adofaer es un hospital psiquiátrico de alta seguridad donde habitan los monstruos más oscuros de la mente humana: asesinos, manipuladores, criminales que se esconden detrás de una máscara de enfermedad.
Anthony Cadwell, un joven residente de psiquiatría, llega con un propósito claro: explorar los límites de la locura y entender lo incomprensible. Pero Saint Adofaer no es un lugar para comprender, es un lugar para resistir. En sus pasillos helados y bajo las luces estériles, conocerá a siete pacientes, cada uno una grieta en la humanidad, cada uno una forma distinta de perder la esperanza.
Pero será su última paciente quien lo marque para siempre. Una historia que sobrepasa todo diagnóstico, y que le enseña una verdad inquietante: los libros de medicina no lo enseñan todo.
¿Qué sucede cuando aquello que intentas salvar te susurra que nunca debió ser salvado?