Dean se ha cansado, se canso de tener un amor prohibido, de tener deseos por su hermano pequeño, el sabe que está mal y sabe que lo ha dañado de mil maneras, Dean quiere de hacer algo bien respecto a Sammy o eso cree el.
Gi-Hun busca acabar con los Juegos, pero no sabe que In-Ho, el hombre tras la máscara, arriesga todo para protegerlo. Entre la tensión de los retos y las miradas, ambos se acercan peligrosamente, atrapados entre el deseo, los secretos y un sentimiento que podría destruirlos.