La paz no dura para siempre, la vida tampoco. Alexandria no es atacada hace mucho, mis hijos no conocen lo que es un caminante de cerca y tampoco tienen el valor suficiente para matarlos de una vez. La paz se acabó y ahora más que nunca debemos estar unidos como la familia que somos, pocos saben de mi pasado y si lo tengo que volver a pasar solo para salvar a las personas que amo, volvería a pasar aquellas torturas que hasta el día de hoy me persiguen.