Había una vez una princesa, que más que tener su propia historia con un final feliz, se lo brindó a una gran amiga. Siempre fue el centro de atención ante todos. Paseaba a carruaje luciendo fabulosos vestidos de gala a todo momento, la luz del sol siempre reposaba sobre su fina corona de oro, deslumbrando a todo aquel que estuviera cerca. Soñaba siempre con ser la protagonista de su historia, no ser la sombra de otra; sin embargo, aprendió que la palabra sacrificio es mucho más profunda de lo que esperaba. Este cuento debería llamarse Simone. Sin embargo, se llama Arabela. La historia de un dulce personaje secundario, alguien, por el cual nadie daría su vida con tal de su felicidad. Alguien, que daría su propio final feliz por el verdadero protagonista. Esta es una historia a la sombra de otra más grande y fantástica. Quédate y averigua todo lo que depara a Arabela.