David, un chico que a simple vista era inseguro, miedoso, tímido, amable, cariñoso y tenía muchos rasgos que toda madre deseaba en sus hijos; Esta hermosa criatura ejemplar, de 4 años de edad, tenía ciertos rasgos físicos que lo hacían notar muy adorable y tierno. Cabello negro, ojos oscuros, piel canela, mirada brillante, labios rosados por naturaleza, perfectos hoyuelos en sus mejillas al sonreír, dientes blancos como leche, un cuerpo curioso, con una estatura bastante llamativa. Siempre era muy bajo para su edad. Todo esto lo convertía en el niño más tranquilo y pacífico que podría existir.
Pero no era lo que se notaba, ni él mismo lo sabía.
Pero llegó algo a su vida, logrando inducir a su mente que eso era su destino, alcanzando cambiar un poco las cosas. Esto logró un giro inesperado, haciendo que su nueva personalidad empezara a manifestarse, y comenzó a tomar en cuenta que el mundo no es como sus padres lo pintaban.
Era muy duro. Problemas como: Calificaciones... "Amistades" y méritos.
Cada vez se complicaba más su vida, pero no pasaría mucho tiempo para notar que solo debía correr... y saltar para olvidar...
Él es el único peligro presente cuando está cerca .
Ella es su tentación.
Él es un indiscutible error .
El señor de la oscuridad en Nueva York , el único que puede mostrarte que es el temor con tan solo una mirada .
Nadie nunca a logrado domar su corazón tan negro como la misma noche , él no tiene ningún tipo de remordimiento por nadie , no le importa nadie con tal de seguir en el poder .
Hasta que llega ella .
Que lo hace cambiar no tan solo de idea sino que lo hace mirar más allá de la lujuria .
Inicio de publicación 29_9_2024