Porque hay tantas cosas que no se dicen pero que todas pensamos; para que el sexo deje de estar centrado en el hombre. Porque tenemos derecho a ser libres de sentir placer, y porque es deber de todas lograr que nuestra sexualidad se respete. Porque somos fuertes y hermosas y nuestro cuerpo no tiene por qué darnos vergüenza. Porque el feminismo tiene que dejar de ser un movimiento y pasar a ser una realidad; porque no queremos ser mejores, pero sí iguales; porque ya es hora de que el mundo entienda que las mujeres pueden hablar de sexo si es que quieren; y para que eso deje de significar que una mujer es puta si lo hace - y para que ese 'puta' deje de ser un insulto: voy a escribir todas las semanas un pequeño texto que hable de mi propia experiencia en torno al sexo y de la libertad que nos merecemos tener en torno a él. Porque mi cuerpo es mío y porque es hora de decir las cosas como son. Sin miedo.