-Eso es un misterio, casi una hamartia. Dijo el chico nuevo.
Miré hacía al frente donde se encontraba situado el chico nuevo, era muy alto y delgado, no podía verle la cara pero su pelo corto castaño se veía tan suave y limpio.
- ¿Qué exactamente le parece un misterio señor...? ¿Me repite nuevamente su apellido por favor? Preguntó nuestro profesor de filosofía.
Todos en la clase se comenzaron a reír.
- Eisenhower, me llamo Zadkiel Eisenhower.
parecía un poco mayor para tener diecisiete, su voz sonaba segura de si misma, casi tan perfecta como él.
-Señor Eisenhower, tanto usted como muchas personas la filosofía les ha parecido un misterio todo esto y es verdad, cada una de las cosas que usted ve y percibe encierra un misterio en sí mismas... comentaba mi profesor.
¿De qué están hablando? me preguntaba yo en la mente. ¡buena hora de estar desconcentrada Sky! me decía a mi misma. Volví a mirar al chico nuevo y él solo asintió con la cabeza, no se veía satisfecho.