Dulce delirio

"Sonríe, te están mirando". Me dijo aquella voz en mi cabeza.
"Cúbrete bien, o lo verá alguien". Me bajé la manga ocultándome de las curiosas miradas.
"No bajes la guardia, no debe saber que eres débil...". Lo miró retadoramente antes de recibir el golpe.
Cada minuto en los Estados Unidos un promedio de 24 personas son violadas, maltratadas físicamente o acosadas por su pareja íntima, lo que representa un total de más de doce millones de personas en el año, incluyendo a mujeres y hombres.
En Chicago, Illinois, la situación no es distinta que en otros lugares, y eso muy bien lo sabe Thalía Wells. A sus diecisiete años, ha tenido que lidiar con distintas situaciones en su casa por Neik, la pareja de su madre que no conoce otra forma de pedir las cosas más que a los golpes.
David Lasarre, llega a Estados Unidos con la excusa de ayudar a expandir la empresa de sus padres, pero lo que realmente lo impulsa son los deseos de venganza que no dejaran de atormentarlo hasta que lleve a cabo su cometido. Sin importarle a quien afecte o de qué forma, hará lo que sea para lograrlo.
En un ridículo incidente, Thalía se verá en el momento y lugar equivocado, uniendo su destino al de David por error y topándose con diversos problemas.
Ella será su dolor de cabeza. Su dulce delirio.
Él será su próximo reto a vencer. Un crush muy difícil de conocer.
Porque las mejores cosas suceden en los momentos más simples y con las personas más inesperadas.