Laura Marano ha estado enamorada de Ross Lynch desde que tiene memoria, un amor que solo le traía sufrimiento y vergüenza. Ella sabe que no es saludable amar a ese hombre de la manera en la que lo hace, pero no puede evitarlo. Ross Lynch nunca la ha visto como algo más que la hija de su jefe, no era su estilo de mujer y no tenía nada para ofrecerle que otra no pudiera. O eso creía. De todas formas, él nunca rechaza a una mujer que está dispuesta a hacer un sábado por la noche más divertido y eso fue exactamente lo que Laura, en un acto desesperado y humillante, le ofreció. "Una noche. Nada más que eso", le rogó, ella lo necesitaba tanto que ni siquiera pensó en el ridículo que estaba haciendo. "¿Por qué no?", se preguntó él y accedió. Pero, cuando la mañana llegó, todo vuelve a ser como antes, solo que con el pasar de los años las cosas entre ellos cambiaron. Laura vuelve a ser la hija de su jefe, la heredera de la empresa que él tanto deseaba, pero se convirtió en un pasado que prefiere ocultarle a su esposa tras tres años de matrimonio. Ross vuelve a ser el hombre que ella quiere y no puede tener por no ser lo suficientemente bonita y atractiva, con la diferencia de que ahora también era el hombre que rompió su corazón y el padre de su hija. #618 en De Todo