Lucas es mi nombre. Narra la historia encarnada de un joven ante el camino de la aceptación por parte del mundo, por parte de la sociedad y por parte de lo más importante, su familia. La misma que quedará paralizada cuando su verdad salga a la luz. Los sueños y sus anhelos que un día quiso poseer, se harán más difíciles a medida que los intente cumplir ¿Será acaso que su condición ha de ser el impedimento? O ¿Solo deberá creer en sí mismo? En un espacio donde la homosexualidad está mal vista y los derechos de aquellas personas son peores a medida que avanza la ciencia, la aceptación marcará su corazón, haciendo que su propia familia lo ha de despreciar. Una gran barrera se interpondrá entre la felicidad de él ¿Acaso Dios lo volverá a ver con los mismos ojos cuando ha de verlo? ¿Acaso podrá sobrevivir ante la marginación de su espíritu? Deberá ser fuerte ante las adversidades, pues el camino hacia la felicidad nunca tuvo más espinas que cuando se vistió de rosa.