Después de Operación Triunfo todo se volvió un camino de obstáculos para Ana Guerra, estaba tan confusa porque su vida dependía de una elección. Luchar con ella siendo quien realmente quería ser o mantener la estabilidad con él. Cansada de estar en continua tensión viaja a Galicia para pasar unos días con su amiga Miriam con la que al final de concurso unió lazos afectivos muy importantes para ambas.