Nunca pensaste, que pasaría si dieras tu alma al famoso Diablo. Justamente es lo que hice, pensando que era un juego absurdo, tras la muerte de mi hermana, quería contactarme de cualquier forma con ella. Pero, no todo sale como lo planeado, el juego se esfuma, tengo que cuidar de otra vida a parte de la mía.. Esto no estaba en mis manos..
SunHee esta a mi lado, mientras yo solo tomo el valor para poder hacer lo acometido..
SunHee: No creo que sea buena idea.
Elizabeth: Quiero ver a mi hermana, quiero saber que sucedió.
SunHee: Está no es la solución.
Elizabeth: Lo siento ya esta tomada, no hay vuelta atrás.
SunHee: yo me voy, no quiero ser parte de tu mente retorcida, adiós.
Elizabeth: Cobarde.
Sin mas comencé con el ritual dije aquellas palabras que encontre en el libro de mi hermana.
《Diablo, Necesito un favor, tu me lo daras, a cambio de mi alma, tu presencia me daras》
Elizabeth: Sabía que esto era una pérdida de tiempo.
Las luces se apagaron, una sombra salió del piso de cerámica, un ser inexplicable.
~gran error en nombrarme, cariño~.
Despues de todo, no fue mala idea vender mi alma al diablo.