Contar una historia no transmite tanto como vivirla, pero aun así os narrare el día a día de un "No suicida", que no es más que la vida de un adolescente de 15 años que tiene una forma particular de vivir.
El objetivo de esta historia es que se sientan identificados, nunca comprendemos realmente a una persona, no sentimos ni pasamos lo mismo que otros, pero podemos identificarnos y encontrar un poco de similitud, además de un espacio de comprensión para reflexionar y sobretodo desahogarnos e inspirarnos, porque solo hay una vida y que mejor que aprender de ella.