Martina está cansada de caminar con zapatos que no son de su talla. En ocasiones camina con los zapatos de su hermano, pero son tan pequeños que no le entra ni la mitad del pie. Ocasionalmente camina con los zapatos de su madre, pero ya están viejos, tienen agujeros y hacen mucho daño. A veces camina con los zapatos de Nona, le van grandes y son incómodos. De tanto en tanto piensa en caminar con los zapatos de su padre, pero esos hace tiempo que desaparecieron y no recuerda si alguna vez llegó a probárselos. Ha hecho unas largas caminatas con los zapatos de Oliver y Daniela, y aunque son los que mas se acercan a su talla, no son los suyos.
Martina sabe que ponerse en los zapatos de los demás es complicado y a veces no puede caminar muchos kilómetros, por eso quiere aprender a caminar descalza.
Kim nunca pensó que mentir en su currículum la llevaría a una completa travesía con su joven jefe.
Nico nunca pensó que darle una oportunidad a Kim la convertiría en el amor de su vida.