Alexandre Ochoa, detective privado que añora algún caso difícil digno de su talento, recibe una llamada cuando se encontraba cerrando su oficina. Era Paulina Miranda, esposa de Raimundo Ortiz, un famoso diseñador que hace un par de horas se había suicidado. Resulta que, en realidad, se trata de un asesinato cuyo autor podría ser hasta su conocido más cercano.All Rights Reserved