Lo extraño no es ver que los hicos O'Neill manipulen mentes y objetos, lo extraño es enterarme de que nadie puede ver lo que ellos hacen, excepto yo. No, no confundamos las cosas. Eso para nada es tener suerte, al contrario, es para mí un castigo, y lo que pase de aquí en adelante depende de saber en quien puedo confiar, y con quien corre peligro mi vida. Es difícil tratar de ser alguien que no puedes ser. La sangre llama, y con ella el destino ya está forjado.All Rights Reserved