Nadie del pueblo recuerda exactamente cuando llegó el Padre y la monja, ni cuando ni quién les dio estos títulos, solo saben que no pueden desobedecer a ninguno.
Y aunque tuvieran una imagen casi divina frente a los civiles, nadie sabía exactamente que pasaba en el campanario a altas horas de la madrugada, cuando solo Dios era conciente de las acciones en su contra.
[ADVERTENCIA: Contiene smut y relación a lo religioso que puede ser irrespetuoso si no toleras la sátira]