Desde que nació Astrid era una chica muy responsable y obediente con respecto a todo, iba a clases por las mañanas, clases de música y particulares por la tarde, tenía toda la vida planeada. Una hija ejemplar con unos padres con no demasiado tiempo para ella. Nuestra protagonista tuvo suerte hasta en el amor, duró con su novio de primaria hasta último curso del instituto, pero algo pasó ese último curso que hizo que Astrid perdiera todo de vista.All Rights Reserved