-Eres mía pequeña- dice una voz masculina en mi oído haciendo que mi cuerpo se estremezca. -no soy de nadie muchachote- aquella chica junta toda su fuerza y lo empuja para darse vuelta y mirar aquel chico con una mirada tan hipnotizante. Este se acerca peligrosamente a ella y le toma las muñecas acorralando a la muchacha contra la pared y este se acerca a su oído para susurrar. -eres mia desde el momento en que te vi- dice mientras se relame los labios y se acerca al cuello de la chica... si quieres saber como termina, sigue leyendo