La vida de los gemelos Gómez siempre había sido fácil. Su padre, Enrico Gómez, se casó con una modelo guapísima que dio a luz a dos gemelos dignos hijos de ella. Aarón y Saúl llegaron para alegrar la vida de sus padres y cómo prueba de un amor que solamente duró cinco años, cuando un día su madre decidió poner fin a aquella vida y se marchó con la mala suerte de sufrir un accidente mortal de autovomil. Aquello les cambió la vida por completo a los tres varones, lo que provocó que Enrico se convirtiese en un padre luchador y fundador de Vinos Gómez, una de las empresas más famosas del sector. Los gemelos siempre habían estado muy conectados en todo hasta en la forma de hacerse pasar por el otro. Lo que empezó como un juego terminara siendo lo más real que han vivido nunca. No te pierdas esta historia.