Harry está enamorado de un modelo, el cual no tiene idea de cuál es su nombre, le gusta el café y ama el arte. Louis es burbujeante, ama que lo fotografíen modelando ropa y tiene moretones que oculta con maquillaje. ¿Quién diría que Harry tendría la suerte de encontrar a su tan adorado modelo, y Louis de encontrar a la suavidad y ternura personificada, en una cafetería?