No era amor, era necesidad, no era necesidad era lástima, no era lástima era desesperación, no era desesperación era amor. Era todo eso y más, hace tanto que Gerald no lo soportaba, hace tanto que había dejado de rogar, ahora estaba allí sentado en la cama, mirando al bebé dormir mientras que en la sala Johan seguía durmiendo después de que tuvieran sexo.All Rights Reserved