Historia sin editar, por lo tanto, contiene errores ortográficos. He probado varías carreras universitarias y ninguna es suficiente para mí. Le tengo mucha envidia a las personas que desde niños saben lo que quieren para su vida, en cambio yo, yo siempre quise un montón de cosas para mi futuro. A los cinco quería ser una princesa con unicornio brillante y un cuerno mágico. A los siete quería ser veterinario para socorrer a todo animal que no tuviera un hogar. A los ocho quería ser un astronauta así vivir en la luna. A los doce quería ser maestra y a los quince quería ser médico por lo que me metí un semestre a esa carrera pero fracasé brutalmente al reprobar la mayoría de las materias y estas me aburrían, luego intenté ingeniería civil y volví a caer. Esta bien equivocarse, cerrar una puerta pero hay muchas más, y sigo sin saber que quiere mi corazón, pero he aprendido que la humildad te abre millones de puertas y la soberbia la cierra. Sin embargo ahora he decidido que mi siguiente opción sería maestra, pero tengo la misión de descubrir si esa es mi vocación.
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