"Su esponjosa extremidad se meneaba de un lado a otro sobre mi cara, con esta noche era la cuarta seguida que ocurría. Abrí mis ojos refunfuñando, no había conseguido conciliar el sueño hasta hace un par de horas y ahora, me encontraba siendo levantado por un intruso en nuestra cama. -¿Qué necesitas?- Pregunté irritado. Todo estaba jodido. Y como si fuese un mal chiste recibí un maullido en contestación. -No te entiendo.- Me observó con sus enormes y dilatados ojos , producto de la oscuridad. Emitiendo un débil casi apagado ronroneo que anunciaba que se quedaría ahí probablemente toda la noche. Subió encima de mi pecho, colocando ambas patas en el suyo para terminar por encorvándose a su forma. Suspiré pesado mientras pasaba una de mis manos por su suave pelaje. -Yo también lo extraño.". #297 en wolf