Esta historia cuenta la impresión de una familia muy dividida en religiones y creencias al enterarse que su hija es lesbiana en pleno año 2016, el miedo que siente una niña de 15 años al recordar y aceptar que nunca sintió atraicion por un hombre, sin haber escuchado nunca de orientaciones sexuales, ni haber tenido conocimiento de ello, era algo tan raro y a la vez tan particular, sentía un miedo terrible porque siempre en la iglesia lo había escuchado como un pecado, y con sus pensamientos homofobicos que le inculco su padre trataba de tapar su homosexualidad y sentimientos
Elliot Jensen and Elliot Fintry have a lot in common. They share the same name, the same house, the same school, oh and they hate each other but, as they will quickly learn, there is a fine line between love and hate.