
"-Te quiero ". Eran pequeñas palabras con grandes sentimientos. Ya no podía omitirlo. "-Ahora mismo podría una señora drogadicta que quiere vender tus órganos. Pero no puedes saberlo porque no me ves". "-Pero confío en que cuando te presentaste no mentías, y eso espero". "-Yo....yo también.... también te quiero". En ese momento sonreí. No creo en el amor a primera vista, especialmente porque en ese entonces había perdido la vista. Pero eso no significa que no crea en el amor.All Rights Reserved