¿Cuántas veces dejaste de decir algo para no herir a la persona que amas? Cuando me di cuenta de mi error, viví los peores días de mi vida. Sin embargo, cómo vivir la vida con una enfermedad que me está matando junto con el amor de la persona que más amo, mi Ana. Nunca te lo dije y espero nunca te enteres, sé feliz y yo feliz seré entre tantas cartas que jamás te entregué. Aunque, viendo lo que ha pasado, jamás podré vivir mis últimos días tranquilos.