CASTILLO, siempre quiso a CAIRI; ella la chica de otro país, de otro mundo, de otro universo, donde la inocencia aun estaba viva, donde la ilusión por encontrar un hombre con el verdadero sentido del amor se mantiene, tan viva y flamante, como aquella llama de libertad por la que algunos presos del desamor aullan en las noches de invierno, donde solo puedes pensar en que amanezca, para que el frío del dolor deje de doler tanto.
Estos jovenes completamente desconocidos, solo tenían como punto en el horizonte vivir sin estar enredado en el amor. Pero que paso? Porque se encontraron, que los llevo a quererse y despues a huir de si mismo, como si estuviera a punto de morir.